Día de Acción de Gracias

La nota breve

Mis padres eran por tradición católicos, aunque nunca lo vi asistir a la iglesia, Sin embargo yo sí fui a la iglesia, ya que una vecina, católica devota,  organizaba a los niños de mi barrio y nos enseñaba el catecismo, preparándonos para que tomáramos la comunión, lo cual hice cuando tenía cerca de diez años. Hago esta introducción aquí, para decirles que en aquella época, no se enseñaba nada sobre el día de acción de gracias, porque esto era en mi país Cuba, donde no se acostumbraba a celebrar esa fecha.

Sin embargo al cumplir la edad de 10 años (1937) mis padres conocieron el Evangelio, por medio de un gran evangelista llamado, Lucas Ponce Frías, quien adoctrinó a mis progenitores, y por medio de esas instrucciones llegamos a conocer la celebración del “Día de Acción de Gracias”. Cuando cumplí doce años, edad cuando puede ser bautizado un niño, según lo interpreta nuestra iglesia, fui bautizado junto a Cira Almeida y tres jóvenes más de otra familia convertida.

El pastor local en esa fecha era Darío Pérez, un gran pastor y fiel siervo de Jesucristo. Él nos instruyó con gran responsabilidad sobre la doctrina de Jesucristo y  las prácticas de la iglesia, dentro de ellas, la celebración del día de Acción de Gracias, y este día lo he celebrado desde entonces hasta hoy, o sea a través de setenta y cinco años, y creo que en todo ese tiempo sólo no he celebrado la fecha de ese día, el año 1966 por estar en la prisión de los comunistas, que sufrí en Cuba por causa del Evangelio. Pero desde que llegué a este bello país de hermosa libertad en el año 1969, conmemoro esta fecha preciosa del Día de Acción de Gracias, junto a mi querida familia y a mi amada congregación de mi Iglesia.

Ernest Williams Sellers, más conocido por nosotros como Apóstol Daddy John, por ser el fundador de nuestra iglesia, como era americano, nos enseñó el significado especial de este día de dar gracias.

Y para los que no saben quien fue el que estableció oficialmente la celebración de este día en Estados Unidos y todas sus posesiones en todo el mundo, estoy insertando aquí el siguiente párrafo, porque hay quienes olvidan dar gracias y así ya lo declaraba el presidente Abraham Lincoln en 1863, cuando proclamó el último jueves de noviembre como un día de acción de gracias y adoración a nuestro Padre celestial y benefactor nuestro. He aquí su declaración:

“Ningún consejo humano ha ideado, ni ninguna mano mortal ha logrado estas grandes cosas. Son los regalos benévolos del Dios más alto, quien a pesar de la ira que le causamos con nuestros pecados, no obstante ha recordado tenernos misericordia, me ha parecido apropiado y oportuno, que deben ser reconocidos solemnemente, reverentemente y con gratitud, al igual que con un corazón y una voz por todos el pueblo americano. Yo, por lo tanto, invito a mis conciudadanos en cada lugar de los Estados Unidos, y también a los que están en el mar y los que residen en tierras extranjeras, a apartar y observar el último jueves del próximo noviembre como un día de Acción de Gracias y Elogio a nuestro Padre benéfico que mora en el cielo.

Y les recomiendo que, al reconocer lo que a Él debe atribuirse con justicia por tales dádivas y bendiciones singulares, también, con penitencia humilde por nuestra terquedad y desobediencias nacionales, encomienden a Su cuidado tierno a todos los que han quedados viudas, huérfanos, los que sufren o las víctimas de la lamentable disensión civil en la que estamos comprometidos inevitablemente, y suplicamos fervorosamente la interposición de la Mano del Todopoderoso para curar las heridas de la nación y para restaurarla tan pronto como sea consecuente con los propósitos divinos en el disfrute de paz, armonía, tranquilidad y Unión”. Presidente Abraham Lincoln

Ap. Florentino Almeida

Pensamiento: ¡Feliz Día de Acción de Gracias para todos!